Si realmente deseas rendir al máximo, entiende cómo funciona tu coco para lograr ese punto extra
Me pongo nervios@ antes de las competiciones
No pasa nada, esto es algo habitual. ¿Quién no ha tenido nervios alguna vez a la hora de enfrentarse a un reto?
El problema viene cuando te condicionan para rendir y disminuyen tus capacidades. Ahí es cuando salta la alarma y debes reaccionar.
No te puedes permitir arrojar por la borda todo el trabajo de preparación.
Pero si logras entenderte a ti mism@ y comprender mejor lo que pasa por tu cabeza, te sentirás más dueñ@ de tus pensamientos y sentimientos.
Manejarás mejor esos nervios y lograrás que no te perjudiquen.
Creo que me falta confianza en mi mism@
No es cierto que los grandes deportistas nunca tienen dudas y siempre confían en sí mismos.
Es muy probable que existan situaciones y momentos puntuales en los que hasta los mejores tienen inseguridades.
Y si estas dudas aparecen con cierta frecuencia hay que actuar. Si te están impidiendo crecer y mejorar hay que hacer algo.
Para tener confianza en ti mism@, tienes que realizar un ejercicio profundo de introspección, buscar dentro de ti mism@ y sentar unos cimientos fuertes.
La autoconfianza brota del interior y no de los típicos mensajes o palabras externas vacías que valen para tod@s.
Soy demasiado perfeccionista y no soporto fallar...
¿Es una virtud ser perfeccionista ? Claro que si, es muy positivo querer realizar las cosas cada vez mejor y querer cometer cuántos menos fallos mejor. Esto se llama progresar.
La cuestión es ¿Te obsesionas con no cometer fallos? ¿No te permites ni uno? ¿Cometer fallos te condiciona mentalmente?
Si tienes este tipo de sensaciones incómodas compitiendo es cuando surge el problema.
Una virtud puede convertirse en tu enemigo y barrera para competir bien. Te limita y te hace pequeñ@.
¡Ponle remedio!
Creo que me desconcentro compitiendo y eso me lastra
La atención y la concentración son dos aspectos muy importantes para rendir deportivamente, ¿no?
Parece evidente que cuanto menos atent@ estés, peor rendirás.
Estar muy atent@ te puede dar esa ventaja competitiva crucial con el resto de deportistas para marcar la diferencia.
Si logras dominar estas variables, puedes ganar ese “punto extra” y reaccionar mejor y antes que tu rival.
¿Tú, que tal te concentras? ¿Cómo de atento@ estás?
No llevo nada bien la presión
La presión externa puede causar “estragos mentales” y perjudicar el rendimiento. Puedes pegarte un disparo en el pie si no lo gestionas bien .
¿Sientes que la presión te perjudica? ¿Crees que las expectativas demasiado altas te lastran? Tranquil@ esto es normal. A todos nos puede agobiar no satisfacer lo que los demás esperan de nosotros.
Pero, ¿realmente sabes lo que los demás esperan de ti? ¿Estás dentro de sus cabezas? ¿Conocen tu contexto y circunstancias particulares para saber cómo tienes que rendir? ¿Por qué ellos tienen que decidir hasta dónde tienes que llegar?